El logo de Cuatro estaba por todos los lados, como las pelotitas que usamos como nariz. A determinadas horas de la noche uno ya se siente un poco payaso (la foto la hizo un segurata que parecía no haber visto una cámara digital en su vida).
No pudimos evitar hacernos fotos con los presentadores. Y hubo de todo. Cuando Jose se acercó al estilista Daniel el Kum (telita el nombre) uno de los jurados de Supermodelo, Daniel le dijo sin cortarse un pelo que si tenían que hacerse la foto allí o podían irse a otro sitio (glups). No hace falta decir que esta foto había que hacérsela porque si este pavo sabe de estilismos que venga Boris y lo vea.
Alex Gonzalez, ex de Chenoa y prota de Cuenta atrás junto a Dani Martín (también estaba por allí mucho más delgado y sin Patricia Conde que para eso es de la competencia), me parece uno de los tipos más potentes que hay ahora mismo y que gana pero mucho en persona. Como me lo había encontrado varias veces decidí que ya era hora de hacerse una foto con él. Alex es muy tímido y antes que nosotras tuvo que hacerse más fotos con otras perritas que andaban por allí. La que no le quitó ojo fue Raquel Sánchez Silva, que parecía darle sentido al nombre de su propio programa, Qué desperdicio.
Otro que me dejó sorprendida fue Josep Lobato, el cara bonita de Money Money, un tipo que parece más bajo en la tele y menos guapo (le salen unas orejas que parece el Rey León). En persona, aparte de majete, el tío es parlanchín y aprovechó el momento para preguntarnos por nuestros curros y argumentar el por qué del éxito de los presentadores de la cadena. A los tíos nos los hizo ni caso y eso que según mi compañera Ana Josep es gay (uno de sus novios era amigo suyo).
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