17.1.10

Fringe 2x11: el arrepentimiento de Walter y los pasteles Devil Dogs (a lo Zombieland)

[aclaración: se emitió en EE UU como episodio 2x11 y así fue como lo subí en el blog. Pero se tiene que contabilizar como episodio 2x12 porque el episodio 2x11 es un episodio "perdido", que no se emitió en su momento y lo metieron aquí. En España este episodio "perdido" aparece como el último de la 1T, episodio 1x21, llamado El episodio perdido - Unearthed]

Momentazo en el que Walter descubre en uno de sus escondrijos (antes de perder la memoria se dedicó a esconderlo todo en recovecos secretos) los bollos Devil Dogs. Si lo buscas en internet te aparecerá un grupo de rock yanqui y una web muy rara de estos pastellillos (relacionada con los Marines). Ni puta idea. Se ha montado un foro de debate sobre si la caja que aparece en la serie es nueva. Me recordó a Zombieland cuando Woody Harrelson se pirra por unos Twinkies (parecidos al pantera rosa y todos esos). Actualizo: existen de la marca Drake's.

Lo más interesante del episodio 11 de la segunda temporada (Ver o no ver - Johari Window) es cómo nuestro Walter una vez más nos sorprende. En Edina, un pueblecito donde es mejor no ir a parar, viven personas que físicamente se parecen al Hombre elefante. Un espectáculo, vamos. Son capaces de disparar si se les acorrala. Cuando nuestros protas llegan allí van a por ellos, claro. La idea retorcida es que gracias a un sonido permanente que se oye como un extraño hilo musical si un extraño entra al pueblo no ve la cara real de los monstruos que pasan desapercibidos. Pero lejos del ruido los monstruos son monstruos, ni más ni menos. Y son así por un fallido experimento científico en el que Walter estuvo involucrado (y que se llamaba Proyecto Elefante, claro). Su compañero en tan vil tarea experimentó hasta con su hija, a la que dejó deforme, y ésta a su vez a su hijo pequeño. Y Walter, que se siente responsable y ha cambiado el chip (tal vez por el lavado de cerebro que descubrimos en el 2x10 - Materia gris) obliga a Broyles a que esconda el caso y deje al pueblo de Hombres elefantes en paz. "Me gusta la verdad", dice. ¿Qué ocurrirá cuando le diga a su hijo Peter La Verdad? Otra frase buena de Walter: "El trabajo es salud. Es increíble cómo cura el alma".

Hay un guiño a El mago de Oz, pues Walter teme perderse otra vez o que le secuestren. "Estoy aprendiendo a apreciar la cobardía", dice, porque el León llevaba razón. Peter le dice que no hay Monos voladores. Cuando Walter ve la foto del niño deforme recuerda una melodía que no es otra que la de Deliverance (se parece al niño del banjo), aunque en comisaría insinúan que se parece a un bigfoot (algo que Walter niega).

Sobre el episodio 2x10 del que no escribí post, decir que Walter es secuestrado. Descubrimos que hace años le extirparon trozos del cerebro que colocaron en otros. Querían que Walter "olvidara" sus hallazgos, y ahora pretenden recuperar esos recuerdos pues Walter sabe cómo cruzar al otro lado, donde está el portal. Por eso le volvieron loco, como a otros tantos. Walter siempre estuvo sano. Al final del episodio se "reencuentra" con William Bell sobre la camilla. En este episodio: el coche de Olivia tiene la matrícula 1C3PO1 a lo Star Wars. Walter le comenta a Astrid que hay un disco que le relaja del grupo Violet Sedan Chair. Hay varias referencias a Lovecraft, como el nombre del hospital Dunwich (el relato El horror de Dunwich). Deborah Crampton y Stuart Gordon son los nombres de dos de los pacientes intervenidos, un guiño a la actriz Barbara Crampton y al director Stuart Gordon de Re-Animator. Thomas Jerome Newton, el villano, usa el mismo nombre que el alienigena de El hombre que cayó a la Tierra (1963). El doctor Paris en realidad es un alias de William Bell y un guiño al actor Leonard Nimoy, que interpretó a Paris en la serie Misión: Imposible (1969-71).

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