La cuarta temporada de Fargo
Opinión de la cuarta temporada de Fargo
Tras una tercera temporada que no estuvo a la altura (en mi opinión), me costaba meterme otra vez con Fargo, con otra nueva historia, con Chris Rock a la cabeza, un actor que no me gusta especialmente. El tema tampoco estaba muy claro: ¿familias de la mafia enfrentadas entre sí? ¿Esto no está muy trillado? Pues resulta que después de ver unos cuantos episodios la cosa no se queda ahí. Por un lado, Chris Rock es el prota, sí, pero los secundarios tienen mucho peso. El arranque es original: las dos bandas de negros e italianos, por una tradición que se remonta a inicios del siglo XX (con judíos e irlandeses), intercambian a uno de sus hijos para evitar el enfrentamiento (obviamente hay truco y el choque es inevitable). A esta trama muy masculina, por decirlo rápido, se une la historia contada en primera persona de una chavala negra (hija de un blanco y una negra), vecina de una enfermera que ya puede ocupar un puesto privilegiado en el ranking de enfermeras cabronas (ríete tú de Ratched). Esta cuarta temporada de Fargo juega de nuevo con algunas escenas que navegan entre la tragedia y la comedia, como aquella en la que uno de los jefes a punto está de reventar por un sonoro pedo (con esto he flipado muy fuerte), o cómo el personaje de Chris Rock y su colega (Doctor, que no lo es) pretenden venderle a un banco una gran idea: la tarjeta de crédito, cuando esta ni existía. Noah Hawley reescribe la historia de EE UU, con blancos racistas y prejuiciosos, negros emprendedores y elegantes e italianos con ganas de pelea y farrulleros. Supongo que esto evolucionará porque aunque el tema del racismo y la identidad están contados de forma original es cierto que la balanza está un poco descompensada. La música es uno de los puntos a favor de la serie, algunos secundarios y la sensación de que la historia va mucho más allá de lo que en principio parece.
Hay una escena en el 1er episodio de la 4T de #Fargo que ni en la mayor de mis fantasías tragicómicas y escatológicas. Creo que la serie recupera el pulso (a mí la 3 ni fu ni fa) y toca el tema del racismo y la identidad de una forma bastante original (y no soy muy de Chris Rock)
— Yonomeaburro (@Yonomeaburro) September 23, 2020
En el primer poster oficial de Fargo 4 varias latas en primer plano. De una de ellas cae tomate como si fuera sangre, por lo que parece un agujero de bala. Al igual que ocurría con la colcha cosida con retales, cada lata muestra una imagen diferente, de coches, presos, crímenes, camioneta, veneno, un robo… seguramente pistas de lo que veremos en esta cuarta temporada protagonizada por Chris Rock.
Este es el primer tráiler.
Tráiler de la cuarta temporada de Fargo
Se une al reparto Uzo Aduba, tras ser Ojos Locos en Orange is the New Black! No se sabe aún qué personaje interpretará.Con Jason Schwartzman, Ben Whishaw, Jessie Buckley (Wild Rose) y Timothy Olyphant pic.twitter.com/8wNcW7vZLB— Mariló García 🦄 (@Yonomeaburro) January 10, 2020
Con Timothy Oliphant, Ben Whishaw, Jack Huston, Jason Schwartzman, Salvatore Esposito (Gomorra), Jessie Buckley (Wild Rose), Andrew Bird (Baskets) y Jeremie Harris (Legion).
Con Fargo me ha pasado que sus dos primeras temporadas (primera y segunda) me parecieron ficciones televisivas originales y muy superiores a la media. Con la tercera entrega se rompió el hechizo. La vi entera, pero no me emocionó como las anteriores ni me pareció tan extraña y atractiva, así que no desgrané todas sus curiosidades. Nos llegan ahora noticias de que Chris Rock, cómico, actor (creador de la serie Todo el mundo odia a Chris y al que he visto últimamente en la infumable comedia de Netflix, con Adam Sandler, La peor semana) y presentador de los Oscar en 2016, será el protagonista de la cuarta temporada, con una trama un tanto alocada (más de lo habitual).
Descrita como una historia de "inmigración y asimilación, y de las cosas que hacemos por dinero", la cuarta temporada está ambientada en 1950 en Kansas (Missouri), donde los cabecillas de dos sindicatos mafiosos –uno italiano, otro afroamericano– han firmado una paz incómoda intercambiando a sus hijo (algo que se ha venido haciendo generación tras generación). Rock interpreta al líder afroamericano que ha entregado a su hijo a su enemigo, y que debe criar al hijo de su némesis como propio. El jefe de la mafia italiana, que ingresa en el hospital por una cirugía de rutina, muere, así que el juego de poderes cambia. Noah Hawley regresa como productor con el apoyo en la producción de los hermanos Coen.Recordemos que Billy Bob Thornton y Martin Freeman fueron los protagonistas de la primera entrega, que ganó tres Emmy, incluidas mejor miniserie. La segunda, ambientada en 1979, contó con Kirsten Dunst, Jesse Plemons y Jean Smart, y ganó dos Emmy. La tercera, ambientada en 2010, fue protagonizada por Ewan McGregor (en un doble papel), Carrie Coon y Mary Beth Winstead, y no se llevó ningún Emmy. Con esta tendencia, bien lo tiene que hacer Chris Rock y compañía para remontar y volver a ser la Fargo televisiva que tanto me gustaba.
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